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joechapel
SAS Employee

 

Yo crecí en México en la década de los 80s y como muchos otros niños me tocó ver distintas caricaturas o películas futuristas como “Los Super Sónicos”, “Volver al Futuro” o “Terminator”. En esos momentos la gran mayoría de nosotros veíamos como esos guionistas idealistas encontraban formas atractivas de atraer la atención de los pequeños, sin embargo, también fueron grandes precursores de ideas innovadoras y como en su momento Julio Verne, Adolf Huxley o Fritz Lang, los 80’s nos dieron una probada de lo que sería el futuro como la telefonía móvil, video conferencias, citas médicas a distancia, así como la inteligencia artificial en computadoras. A pesar de esto, quiero decir que sigo esperando la patineta voladora de “Volver al Futuro 2”.

 

En toda la historia de la humanidad, la tecnología ha sido parte fundamental de la vida de las personas, para bien y para mal. Cosas tan básicas como ser un facilitador de nuestras tareas repetitivas, hasta realizar grandes cálculos de forma sencilla y rápida. Nuestra generación, la X ha sido marcada por avances tecnológicos abismales. Nosotros pasamos de entregar nuestras tareas en máquina de escribir a enviarlas por correo o subirlas a una plataforma. Pasamos de la TV analógica al streaming. Lo que hoy las nuevas generaciones ven como algo cotidiano, algo con lo que no podrían inclusive vivir, nos damos cuenta de esta evolución y que la dependencia de la tecnología se requiere orientar para obtener grandes resultados en distintos ámbitos del ser humano.

 

Los procesos y las operaciones en el mundo se han vuelto cada vez más complejas, no importa si hablamos de la iniciativa privada, las industrias o empresas comerciales o del gobierno, cada una exige dentro de su propia dinámica, tomar mejores decisiones y cada vez realizarlo en menor tiempo. Si bien es cierto que las grandes industrias como la automotriz para la automatización de sus líneas de producción, las empresas de telecomunicaciones, financieras o de servicios,  han acobijado la tecnología para mejorar sus procesos en diferentes áreas desde el manejo de sus centros de atención a clientes (call centers), hasta el  cálculo de riesgo financiero, o la identificación digital de las personas para prevenir posibles fraudes;, el aparato del gobierno no se queda atrás, incluso al ser el ente regulador y promotor, en muchos casos han encaminado a la tecnología en pro de la sociedad.

 

El Estado tiene tareas muy importantes a lo largo de los distintos departamentos del gobierno como la salud, educación, impuestos, seguridad pública o energía; pero ¿cómo usan la tecnología como catalizador para sus proyectos? En realidad, suena sencillo:  la tecnología ayuda a los gobiernos a tomar acciones y decisiones de forma asertiva mediante el análisis de grandes volúmenes de datos (Big Data). Sin embargo, no es tan fácil: esta tendencia que ha trabajado a lo largo de los últimos años y la tecnología ayuda sin lugar a duda en facilitar la explotación de datos, pero estos son dispersos, dispares y con un crecimiento cada vez más acelerado tendencia que vemos desde el año 2001, cuando el analista Gartner Doug Laney introdujo el término de las 3V: volumen, variedad y velocidad. (Publicación de Investigación de MegaGroup: "Controlling data volume, variety and velocity” https://studylib.net/doc/8647594/3d-data-management--controlling-data-volume--velocity--an).

 

Esta tecnología en particular es una pieza fundamental para la automatización de procesos que iniciaron desde el manejo de bases de datos de las primeras hojas de cálculo a nivel escritorio, para el uso estadístico, tendencias y pronósticos; hasta el uso de la nube, sensores inteligentes para la recolección masiva de información, así como el internet de las cosas (IoT – Internet of Things).

 

Pero en ¿qué ayuda exactamente la tecnología al gobierno? Realizaré una serie de blogs relacionados a algunos casos de uso de industria, para este momento me enfocaré en la Democratización de los datos y la democratización de la analítica, y ¿a qué se refieren estos términos? La democratización permite el uso de capacidades avanzadas de gestión de datos accesible a todo el personal de las organizaciones, facilitando al personal en el acceso al basto mundo de datos con las que se cuenta de forma interna, esto con el fin de contestar problemas de negocio mediante el uso de técnicas analíticas.

 

Podemos suponer que, al disponer los datos a todos los miembros de las organizaciones, va a generar como resultado que los diferentes tipos de roles y perfiles generarán análisis sobre los mismos. Sin embargo, se requiere tener un orden, implementar una cultura del dato, a través de la sensibilización de que datos se disponen, mecanismos e interfaces para la adquisición y recolección de diversas fuentes, adecuación de los datos dispares, estandarización y corrección los mismos, asegurar el control y la seguridad de acceso, así como contar con los mecanismos adecuados para la correcta compartimentación de este a las personas adecuadas, conocer el linaje de los datos quien lo genero, quien lo modificó que proceso y cuando fue, así como estar al tanto del ciclo continuo y si estos son datos estáticos o dinámicos.

 

Terminado esta esta etapa de la democratización de los datos se recomienda contar con sesiones internas para realizar lluvia de ideas sobre el análisis de datos. Esta es una práctica que permite desarrollar un lenguaje común y ser capaces de generar supuestos basados en problemáticas de negocio.  Llegado a este punto la habilitación de mecanismos/plataformas analíticas, la habilitación de la democratización de la analítica, permitirá brindar a las distintas áreas de negocio ser capaces de realizar construcción de algoritmos y modelos de forma más sencilla, mediante plataformas intuitivas, donde no se tenga que realizar investigación y desarrollo de software para el poder ocupar técnicas analíticas, entre estas: regresiones, árboles de decisión, bosques aleatorios (Random Forest), redes neuronales de distintas capas de forma paralela. En lugar del desarrollo, se brindan herramientas de fácil acceso y adecuación de parámetros de dichas técnicas para reducir tiempos y complejidad en el modelado de fenómenos de estudio.

 

Gracias a la evolución de plataformas tecnológicas, tanto software como hardware, las empresas pueden tomar estas condiciones como una gran ventaja dado que pueden realizar distintas iteraciones y generar resultados en menor tiempo, lo cual se traduce en mejores decisiones de forma rápida.

 

De igual manera, la democratización permite a diferentes tipos de roles dentro de la organización generar analítica descriptiva, prescriptiva y predictiva, así como tableros de control o de mando, estas capacidades antes solamente podían ser explotadas por expertos, pero hoy día puede ser usado por casi cualquier persona que tenga curiosidad en el cómo resolver alguna problemática que se le enfrente en el negocio.

 

Posteriormente compartiré algunos otros casos de uso del como la tecnología puede potencializar los datos en proyectos de gobierno.